El niño, de 13 años, supuestamente después de decapitar a su madre, esa noche misma se acostó al lado del cuerpo sin vida de su madre y al día siguiente fue al colegio, según informa el 'Daily Mail'.

El incidente salió a la luz cuando uno de los amigos de la madre del supuesto agresor vio un vídeo en el que se veía al joven cometiendo el delito y denunció a la Policía el crimen. La grabación fue compartida en las principales redes sociales chinas.

Medios locales han informado que los usuarios de la red habían compartido un espantoso vídeo en un grupo cerrado de mensajería instantánea.

Se especula que el motivo del homicidio habría sido una discusión por dinero. El adolescente habría sustraído 400 yuanes, unos 51 euros, a su madre.