Al menos cuatro personas, tres de ellas de una misma familia, han muerto en una pequeña localidad al noreste de Hungría por consumir aguardiente adulterado.

El pasado fin de semana una docena de personas fueron hospitalizados en el municipio de Dámóc, tras haber bebido aguardiente que contenía alcohol metílico.

Entre los fallecidos hay un menor de 14 años, que murió mientras era trasladado a un hospital cercano. Su padre y su tío fallecieron el lunes en el hospital, mientras que una mujer fue encontrada muerta en su inmueble.

Según la policía local, dos personas fueron detenidas, entre ellos el supuesto productor de la bebida.