Un padre de 27 años de EEUU, no sabía qué hacer para que su hijo parase de toser. A mitad de la noche, se despertó y dejó al bebé en un carro junto a la bañera con agua hirviendo.

Antes de dejar a su bebé en el baño, el padre le dio una botella de agua, limón y azúcar pero la tos seguía. Entonces, se le ocurrió dejar a su hijo durmiendo en una habitación con vapor para que actuase como humidificador y con una manta encima.

Una hora y media después, la madre, de 22 años, fue a por él y le encontró inconsciente con una temperatura superior a 42 grados. La ambulancia no pudo hacer nada para salvarle y se lamó a la policía tras el extraño suceso.

Los agentes afirman que el padre no tenía intención de hacer daño a su hijo, según informa 'New York Daily News'. Ahora los médicos le realizarán una autopsia para determinar la causa de la muerte.