José Antonio es monaguillo y sin techo. Mensajeros de la paz le ha regalado un móvil. Introduce en él la clave del wifi de la iglesia y ya está conectado a Internet y al mundo. Asegura que usará su nuevo dispositivo para "mirar ofertas de trabajo y mandar currículum a empresas". El padre Ángel ha repartido otros 99 smartphones a otras 99 personas sin hogar. A Andrés le ayudará a encontrar trabajo.

"Si no estas conectado en redes sociales es imposible. Ya prácticamente nadie recoge currículum en mano", asegura Andrés García, a quien Mensajero de la Paz le ha proporcionado un smartphone. A Noel también le han dado un móvil, aunque todavía, según dice, no ha recibido ninguna llamada. El smartphone le permitirá estar más seguro por las noches en la intemperie.

El padre Ángel, fundador de Mensajeros de la Paz, asegura que hay veces que"'alguien se queja, se molesta y dice: estos sin hogar tienen un móvil, y a veces un móvil de los más modernos. Les echan en cara eso, y ellos no saben que a lo mejor lo único que tienen es el móvil". María en cambio tiene techo pero no dispone ni de Internet ni de ordenador. No sabe usarlo.

"Si no sabes manejar el ordenador, uno está fuera de cobertura", asegura esta alumna del curso de alfabetización informática impartido por Cruz Roja. Es una de las personas vulnerables atendidas por la Cruz Roja. Como ella, el 65% de los usuarios no tiene ni ordenador ni tablet. El 61% nunca se conecta a Internet. Estrella Rodríguez, directora de Estudios e Innovación Social de Cruz Roja, explica que "son personas que se van aislando de la sociedad de las redes". Este aislamiento tiene como consecuencia el aumento de su exclusión.