Una menor estadounidense de 16 años finalmente evitará la cárcel después de haber acabado con la vida de su bebé tirándolo por la ventana tras dar a luz en su casa. La abuela de la recién nacida fue quien dio la voz de alarma a los servicios de emergencias, que trasladaron a la madre y a la bebé al hospital más cercano, pero allí los médicos sólo pudieron certificar la muerte de la niña, recoge el medio omaha.com.

En un principio, la joven dijo que no sabía que estaba embarazada, que comenzó a sentir un fuerte dolor y que entonces nació su hija. Según han explicado fuentes del caso, la joven entró en pánico y por eso cometió el crimen, que finalmente ha acabado reconociendo.

La menor informó a su novio a través de varios mensajes de que se había puesto de parto tras tener fuertes contracciones. Le llegó a decir, incluso, que el bebé era una niña.

Aunque podría haber sido condenada a prisión, debido a su edad, la joven evitará el encarcelamiento, aunque ahora un juez deberá decidir si queda en libertad condicional o es enviada a algún centro especial.