Gabriel Benítez denuncia que de madrugada le sacaron de los pelos y arrastras de los baños de la feria de Jerez de la Frontera: "Me pegaba patadas, puñetazos... fue a buscarme al baño porque no había nadie".

Asegura que el agresor, que también le dejó el codo en carne viva, estuvo diez minutos insultándole. "Me decía maricón, travelo de mierda todo el rato", explica Gabriel.

También agredió a María Palacios, su amiga, que le esperaba fuera del baño. "El miedo fue pensar que nos salíamos de ahí", explica María.

Acto seguido llamaron a la Policía, y pusieron una denuncia detallando que fueron atacados por un varón de complexión muy fuerte, con los brazos muy anchos y estatura media.

Después fueron al centro de salud con varias contusiones. Mientras la Policía intenta detener al agresor, asociaciones de transexuales piden que estos ataques reciban un tratamiento más específico. "Este tipo de agresiones debería tener el agravante de odio", explica Mar Cambrollé, presidenta de ATA-Sylvia Rivera.

Exigen más protección legal para penar, correctamente, la transfobia y la homofobia.