Las conversaciones de Whatsapp de los cinco acusados están siendo clave en la investigación. La Policía judicial está estudiando el contenido de todos sus móviles y sus chats anteriores a la presunta agresión en busca de otras posibles agresiones.

De momento, han encontrado alusiones continuas a la burundanga y a otros sedantes para, según dicen ellos, 'las violaciones'. "Hay que buscar cloroformo, reinoles, cuerdas... para no cogernos los dedos que después queremos violar todos", se puede leer en sus conversaciones.

Lo que investiga la Policía es si se trataba de bromas macabras o delitos premeditados. Tan solo uno de los acusados no pertenecía al grupo de chat 'La Manada', y es que para entrar parece que había que hacer méritos. "Este verano será la prueba de fuego", se lee en los chats.

La acusación de la víctima de Pamplona ha pedido un análisis toxicológico para determinar si utilizaron burundanga durante la agresión, el problema es que su rastro apenas dura unas horas en el organismo. La única opción es a través del cabello, algo que ya están analizando en el caso de la víctima de Pozoblanco.