Rociados con líquido corrosivo quedaban en Alicante cuatro gatos de la misma camada. Uno de ellos ha muerto y el presunto responsable está a la espera de declarar ante el juez.

"Ponemos muchas más denuncias, avisamos mucho a la Policía y a la Guardia Civil, pero en muchos casos ellos no pueden hacer nada porque la ley no se lo permite", asegura Víctor Pérez, miembro de la protectora de animales Felcan.

Los casos de maltrato se han disparado en las dos últimas semanas. En Vélez Málaga, un matrimonio detenido por tener hacinados en su pequeño piso a más de 50 perros y gatos, la mayoría desnutridos y enfermos.

En Paterna, Valencia, se ha detenido también al dueño de un perro que apareció muerto en una acequia con un ladrillo atado al cuello. Y en Burgos, se registraba la detención de un hombre por cortarle las orejas a un cachorro de solo dos meses.

"Nos vienen casi todos los meses gatos que han recibido perdigonazos de gente que su diversión favorita es disparar a los gatos por la calle", relata Víctor. Según las protectoras, el auge de las redes sociales ha provocado una mayor sensibilización. Gracias a ellas se ha podido detener al dueño de un perro en Osuna, en Sevilla. Le ató un neumático al cuello y le prendió fuego.

Sin embargo, critican que las sanciones siguen siendo ridículas. "Si sancionamos con solo 300 euros a un maltratador es casi gratis causar la muerte de un animal", denuncia Silvia Baquero, miembro del Partido Animalista PACMA. Las protectoras denuncian que en otras ocasiones la multa por maltrato no supera los 30 euros.