Amnistía Internacional ha presentado ante la Procuraduría General de la República de México una querella por el caso de Ligia Ceballos Franco, una mujer mexicana que hace unos años descubrió que había nacido en España con una identidad distinta y que había sido entregada a quienes hasta hace poco consideraba sus padres biológicos.

La organización cree que podría tratarse de un bebé robado. En concreto, Amnistía dice que ha documentado numerosos indicios que indican que Ligia Ceballos, registrada en su nacimiento, el 29 de mayo de 1968, como María Diana Ortiz Ramírez, "pudo haber sido sustraída a su familia biológica con el consentimiento de las autoridades españolas, a través de la intermediación de la Diputación de Madrid y con la asistencia del Arzobispado".

"En nuestra opinión, este caso reviste las notas características de una desaparición forzada como crimen de derecho internacional. Además, en el caso de Ligia concurren otros elementos que Naciones Unidas ha identificado como recurrentes de las desapariciones forzadas de menores, como son, por ejemplo, el registro de la niña con información falsa o la falsificación de documentos como su partida de nacimiento", señaló el director de Amnistía Internacional en España, Esteban Beltrán.

Para la ONG, algunos de estos casos de bebés robados "podrían ser hechos constitutivos de desaparición forzada, un crimen de derecho internacional cometido en España durante la Guerra Civil y el franquismo", pero hasta ahora, las investigaciones realizadas por la justicia española "no han fructificado", pues ningún caso ha llegado a juicio, ni han sido tratados como crímenes internacionales.