Montserrat es toda una veterana en las vacaciones amigas, son su tercer año. "Nos cuidan tan bien que en casa ya me dicen: 'Tienes que ir porque vuelves nueva'", asegura Montserrat Aznar, participante de 'Vacaciones Amigas'.

Para Angelines es su primera vez y parece que le está gustando: "Estoy muy contenta con la compañía y que no te ves sola, que en casa estoy sola". Algunas personas como Josep conocen muy bien la labor del voluntariado, ya que durante 15 años él fue uno de ellos. "Puedo aportar ideas nuevas y ayudar a alguien que este peor que yo", comenta.

Todos tienen algo en común, viven solos y, eso, hace que muchas veces se sienten aislados. Por eso, acuden a las 'Vacaciones Amigas', unos días fuera de casa, repletos de actividades, donde la labor de los voluntarios es fundamental. "Hay algunos que me dicen que somos como Ángeles, yo les digo: 'me llamo Ángeles, solo me faltan las alas'", comenta Maria Ángeles Pallarol.

"Se trata de estar con ellos, que te cuenten su vida, porque están siempre solos", dice Mary Molina, voluntaria. En verano es cuando más se nota la soledad, y 'Amics de la Gent Gran' acompaña en Barcelona a unas 1.300 personas. En agosto la soledad de las personas mayores se intensifica, por lo que muchos pasan el verano solos y sin recibir visitas.

"Lo que hacemos es luchar contra esta soledad no deseada y acompañarlos en el camino a nivel emocional", asegura Miriam Miralles, Coordinadora Amics de la Gent Gran. Juntos, voluntarios y personas mayores consiguen reírse, emocionarse y divertirse.