Un joven estadounidense denuncia que varios votantes del nuevo presidente republicano le agredieron por ser homosexual en California. Según explica, los seguidores de Trump comenzaron a gritarle, insultarle por ser gay en un bar de Santa Mónica, California.

Chris Ball explicó que estaba viendo los resultados de las elecciones cuando los partidarios del candidato republicano empezaron a gritarle: "Tenemos nuevo presidente, malditos maricones". Cuando salió del bar solo, lo siguieron hasta un callejón y le comenzaron a golpear, dijo Ball. Lo último que recuerda antes de despertarse ensangrentado en el pavimento era tener una botella de cerveza aplastada sobre su cabeza. Rápidamente sus amigos lo trasladaron al hospital.

Una vez en el hospital, recibió cinco grapas en su cabeza, también publicó fotos de las heridas y de la sala de urgencias para refutar acusaciones en Facebook de que habían sido falsificadas. Además, uno de sus mejores amigos decidió denunciar en su perfil de redes sociales la agresión con fotos de su Ball acompañado de un texto:

"Para celebrar la victoria de Trump la otra noche, los partidarios de Trump decidieron romper una botella de cerveza en la cabeza de mi mejor amigo anoche por ser gay, enviándolo a urgencias. Es una vergüenza pensar que el progreso social se está perdiendo a un ritmo alarmante. Y no es Trump lo que temo. Son sus partidarios quienes ya han recurrido a la violencia, solo por la energía que sienten..."

El miércoles Ball agradeció todo el apoyo a sus amigos y seguidores de Facebook: "Gracias a todos por el apoyo y buenas vibraciones. Sólo quería decir que estoy vivo y bien. Y todavía muy gay".