Un hombre ha sido detenido tras un tiroteo a dos policías locales en el tanatorio de Gavà, Barcelona. El sospechoso ha disparado a los agentes cuando le pidieron que se identificara y se ha dado a la fuga en su coche; en la huida ha resultado herido. Los Mossos han conseguido acorralarlo en una urbanización de Canyelles donde se habría atrincherado.

Descartan que se trate de un atentado terrorista. Ambos policías han sido trasladados por los servicios de Emergencias al hospital. Uno de los agentes ha recibido un tiro en la mandíbula y el otro en la pierna. Uno de ellos se encuentra en estado crítico.

El detenido es un hombre de 44 años y sin antecedentes penales. El arma con el que habría disparado a los agentes podría ser una réplica de un subfusil AK-47.

Los hechos han ocurrido cuando una vecina alertaba de la presencia de un hombre con actitud sospechosa en los alrededores del tanatorio de Gavà. Cuando los dos agentes han intentado identificarlo, el sospechoso ha comenzado a dispararlos.

Según ha contado Raquel Sánchez, alcaldesa de Gavà, una de las testigos ha afirmado ver cómo el coche de policías se había estampado y que el detenido había disparado a ambos.

Tras los disparos ha comenzado un operativo de búsqueda. Los agentes han intentado detener al tirador, le han disparado hasta en seis ocasiones hiriéndole en una pierna.

Él continúa conduciendo hasta la urbanización de Canyelles, donde se atrinchera en una casa abandonada. Finalmente consiguen detenerle en un callejón. La Policía, que ha estado recogiendo pruebas en el lugar de los hechos, sospecha que se trata de un ajuste de cuentas. Investigan ahora si tiene relación con el tiroteo ocurrida hace unos días en Miami Platja y con el altercado, en el que murió el cocinero de este restaurante.