Días antes de la demolición de un antiguo párking de la ciudad alemana de Frankfrut, los responsables del derribo dieron con el propietario de un antiguo vehículo que llevaba ahí aparcado dos décadas, según publica el medio Augsberger Allgemein.

El dueño olvidó el lugar en el que lo había dejado y, a pesar de que lo buscó con insistencia, llegó a la conclusión de que se lo habían robado. Aunque interpuso una denuncia ante la Policía, los agentes no consiguieron tampoco dar con el vehículo.

Finalmente el propietario del coche se olvidó del asunto, ya dando por imposible que iba a recuperar su coche. Sin embargo, ahora, 20 años después se ha llevado una gran sorpresa.