El cadáver de un hombre de 67 años fue hallado en su domicilio en el distrito de Arganzuela, en Madrid, rodeado de basura y con evidentes signos del síndrome de Diógenes en una vivienda a la que los servicios de emergencia tuvieron que entrar por la ventana y protegerse con trajes NBQ.

Según han informado fuentes policiales, el hallazgo se produjo después de que la exmujer de la víctima alertara de que estaba llamando insistentemente a la puerta y no obtenía respuesta.

Al parecer, hacía tres días que el hombre no contestaba al teléfono móvil al que continuamente le estaba llamando su hija que vive fuera de Madrid, por lo que la exmujer decidió ir al domicilio.

Hasta él acudieron los bomberos del Ayuntamiento de Madrid que, ante la imposibilidad de acceder por la puerta dada la cantidad de basura que la taponaba, tuvieron que entrar por una ventana que estaba abierta.

Una vez dentro, comprobaron que el domicilio estaba lleno de basura y que había una persona en su interior que podría estar muerta. Dadas las condiciones de la casa, la facultativa del Samur y el resto de efectivos que accedieron al piso tuvieron que protegerse con trajes NBQ, dotado incluso con oxígeno.