Los hechos ocurrieron en el estado brasileño de Paraná, y como se puede observar en el vídeo, una niña de cinco años grita desconsoladamente a su madre para que le deje entrar en el coche.

Además de los gritos, se ve como la niña corre, se pone incluso delante del vehículo y cuando la madre arranca y se va con el coche la niña corre a gran velocidad detrás para intentar alcanzarla, según informa el 'Daily Mail'.

A raíz de que las imágenes se difundieran en redes sociales, la Policía brasileña y la Fundación para la protección de Niños, Niñas y Adolescentes abrieron una investigación.

Finalmente se determinó que la madre había castigado a la niña, no pretendía abandonarla como se había insinuado desde un principio, y la madre alegó que no se había dado cuenta de que su hija no estaba en el coche.

Pero representantes de la Fundación no comparten esta visión ya que insisten en que la pequeña se puso delante del vehículo y fue la propia madre quien le dijo que se quitara "o sería atropellada".

La Policía ha pedido que la mujer responda por castigos mediante tortura.