Así lo ha explicado el
exalcalde de Tui, Enrique Cabaleiro, quien ha confirmado que él mismo firmó la
orden de precinto de dicha pirotecnia, situada en Baldráns (a unos pocos
kilómetros de la vivienda donde se produjo el suceso), en cumplimiento de una
resolución judicial por un contencioso derivado de problemas urbanísticos.
"Todo parece
indicar que el responsable de la empresa, una vez que ésta quedó precintada,
trasladó a esa vivienda particular de un familiar o bien la actividad o, al
menos, el material pirotécnico para ser almacenado", ha señalado.
La explosión, que se
escuchó en todo el sur de la provincia de Pontevedra, se produjo sobre las
16.25 horas y la magnitud de la onda expansiva provocó daños materiales muy
importantes tanto en la zona de Paramos (con numerosas viviendas afectadas)
como en otras áreas más alejadas.
De hecho, tras la
deflagración se originó un incendio y la columna de humo fue visible incluso
desde puntos altos de Vigo o Redondela.