"Después de unos diez meses limpio me dicen que vuelvo a tener leucemia"

La historia de Pablo Ráez saltó a los medios de comunicación después de que se viralizara una carta que publicó en su Facebook insistiendo en la necesidad de donar de médula , un gesto más sencillo de lo que se cree, para ayudar a las personas que sufren leucemia.

"Después de unos diez meses limpio me dicen que vuelvo a tener leucemia, por lo que hay que repetir el proceso, con la diferencia que esta vez no tengo donante de médula", explicaba

"Siento deciros que la cosa se ha torcido un poco"

El mes de septiembre no arrancaba con buenas noticias para Pablo Ráez,"He de reconocer que esto es de las cosas más jodidas por las que he pasado nunca, pero... o lo aceptas o te vas a casa", escribía su novia transcribiendo las palabras de Pablo, incapaz de escribir debido a que la recaída le afecto a su visión.

"Disfruten de cada bocanada que toman"

Pablo Ráez consiguió que se duplicaran las donaciones de médula ósea en Andalucía gracias a su campaña. Tras ello. pedía a sus seguidores llegar al millón de donaciones en España. No sólo se considerana la imagen de esta campaña, sino también "la imagen que representa la vida".

"¿De qué sirven 100.000 likes si no hay 100.000 donantes más?"

Pablo Ráez llevaba seis días sin escribir en su famoso perfil de Facebook, seis días en la "oscuridad" como él mismo aseguró, y es que esos días fueron todo un calvario para el joven marbellí en su lucha contra la leucemia.

"No pido las donaciones para mí, sino para ver si se puede cambiar a las personas"

Con mensajes como este Pablo Ráez revolucionó las conciencias de miles de personas con su dura realidad para promover las donaciones de médula.

"Podré disfrutar de la libertad, de mi hogar, de mi familia"

"Gracias de todo corazón a todas las personas que han estado ahí día tras día mandándome toda su energía y apoyo". Con esta muestra de agradecimiento anunciaba Pablo Ráez que, con "suerte" y probabilidad, obtendría el alta médica para volver a casa.

"A disfrutar la vida"

Después de 63 días ingresado en el Hospital Carlos Haya de Málaga, el joven marbellí recibío el alta médica y pudo, al fin, poner el pie en la calle. Después, Ráez continuaría con la rehabilitación desde casa.

"No me importa si no llega un donante para mí, lo que importa es llegar al millón"

En una entrevista en 'Espejo Público', Pablo Ráez volvió a dar muestra de su fortaleza y solidaridad. El joven malagueño seguía luchando por conseguir el millón de donantes pese a su salida del hospital tras 63 días.

"Me quiero casar contigo"

Pablo Ráez quiso agradecer a su novia el apoyo que dio durante todo el tiempo que llevaba luchando contra la leucemia. En un escrito publicado en Instagram, el joven mostró el amor que siente por Andrea: "Solo te puedo dar las gracias por todo lo que has hecho y haces por mí, por todos los días que has estado a mi lado tanto en mi salud como en mi enfermedad, eres increíble".

"Pocos pueden pensar en el miedo que puedo sentir yo"

El joven marbellí compartó a través de las redes sociales la noticia más esperada, que por fin tenía un donante de médula compatible. Sin embargo, explicaba que es curioso cómo lo que para muchos es felicidad, para él era "miedo por tener que enfrentarse a la quimioterapia".

"Quiero cambiarle la imagen a la palabra cáncer y lo voy a conseguir"

Pablo explicaba que se encontraba "un poco mejor" y se mostraba ilusionado tras haber encontrado una donante "americana y 80% compatible": "Aún no estoy preparado psicológicamente pero en ello estoy, fortaleciendo mi cabeza, es una larga y dura batalla, pero lo conseguiré y demostraré a todo el mundo cómo de esto se sale".

"Voy a salir de esta,voy a ser libre, voy a poder llevar una vida feliz"

"Siempre fuerte, siempre. Concienciado hasta la médula. Voy a salir de esta, voy a superar este trasplante ,voy a ser libre, voy a poder llevar una vida feliz, una vida sin preocupaciones médicas, voy a dejar de estar preocupado por mi salud, voy a vivir por fin la vida que quiero vivir", decía esperanzado antes del trasplante.

"No me voy a operar de nada, el trasplante de médula no es una intervención"

Se somete a un nuevo trasplante de médula y ha publica un mensaje en su cuenta de Facebook insistiendo en que no se trata de una operación. Asimismo, continúa con su lucha para incrementar las donaciones de médula, un proceso sencillo, rápido e indoloro.

"Con unas ganas locas de empezar a disfrutar de mi vida"

"Hoy ya es 25 de noviembre y me he dado quimioterapia, me he trasplantado y el martes pasado me dí la última quimioterapia de mi vida", aseguraba Pablo, que seguía luchando por su recuperación.

"Valoro mucho estar bien porque sé lo que es pasarlo mal"

Tras 15 días en el hospital después de haber recibido su trasplante de médula, Pablo Ráez continuaría aislado allí dos semanas más, aunque seguía tan fuerte como el primer día de su larga lucha contra la leucemia.

"Todo no va tan bien como debería"

Convertido en un ejemplo para toda España por su inquebrantable lucha contra la leucemia, Pablo Ráez abandonaba el hospital. Aunque no todo eran buenas noticias, volvía a lanzar un mensaje positivo: "Soy un titán y conmigo solo podrá la muerte". No ha sido así, ni la muerte ha podido con este gran luchador, su ejemplo permanecerá por siempre.

"Estoy en un periodo duro en el que tengo un rechazo de la médula"

Malas noticias. Pablo explicaba en sus redes sociales que su recuperación no iba todo lo bien que desearía: "Estoy teniendo ahora un periodo duro en el que estoy teniendo un rechazo de la médula que se le llama enfermedad de injerto contra huésped (eich). Es algo complejo de explicar, pero lentamente me estoy recuperando".

"La médula está luchando por agarrarse bien a mi cuerpo"

Pablo Ráez confesaba que el proceso "es duro, complicado y difícil pero no más que todo" lo que llevaba hasta el momento y se mostraba optimista asegurando que "el rechazo no es tan grave como lo ponen".

"Admito que dan ganas de tirar la toalla, pero sigo y seguiré luchando hasta que llegue mi día"

Pablo Ráez, atravesaba una dura etapa tras su trasplante de médula. "Tengo un 80% de células mías y un 20% del donante y a estas alturas del trasplante debería ser como mínimo al revés", explicaba en su ultimo post en Facebook un mes ante de la peor de las noticias, la de su muerte tras una lucha ejemplar y ser un ejemplo de vida para miles de personas.