Según ha informado la
Policía, la investigación se inició tras tener conocimiento el Grupo de Menores
de la Policía Nacional de los posibles abusos sufridos por parte de una alumna
de un instituto murciano, cuya orientadora conoció de la adolescente episodios
de abusos sexuales que estaba sufriendo por parte de su progenitor.
La menor llegó a
declarar que había quedado embarazada de su padre y que había interrumpido el
embarazo de forma voluntaria. Las pesquisas policiales llevaron a los agentes a
entrevistarse con la menor en el centro educativo, dándose la circunstancia de
que los abusos no habían desistido hasta unos días antes de sus
manifestaciones.
Según las fuentes, el
padre la chantajeaba diciéndole que si quería salir con sus amigas debía
mantener relaciones sexuales con él y que si no, no saldría. La madre de la
niña también ha sido detenida como presunta responsable de un delito de abusos
sexuales y abandono de menores, ya que era conocedora del infierno que estaba
pasando su hija e, incluso, la había acompañado hasta el centro sanitario para
la interrupción del embarazo.
Aunque en un primer
momento la mujer alegó no saber quién fue la persona que había dejado
embarazada a su hija, sí sospechaba que pudiera haber sido su marido,
justificando que ella misma había sufrido abusos en su país, a los 8 años, por
parte de su padre.
Ambos progenitores, de
nacionalidad boliviana, pasaron a disposición del Juzgado de Guardia y el padre
ingresó en prisión. La menor ha quedado a cargo de su abuela materna. El pasado
día 7, la Policía Nacional también detuvo en Murcia a una mujer boliviana de 53
años por consentir, durante ocho años, abusos sexuales a su hija de 15
cometidos presuntamente por un amigo de la familia, de 50 años y nacionalidad
ecuatoriana, que también fue arrestado.