Según la Agencia EFE, agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil han colaborado con la Policía de la República de Estonia en la desarticulación de la mayor organización criminal rusa dedicada al tráfico de drogas, denominada Kemerovo, con la detención en la localidad malagueña de Mijas de su máximo responsable.

En esta operación conjunta, denominada FULCRUM-CARINATUS, y coordinada por el Juzgado Central de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional, fueron detenidos de forma simultánea en Tallín (Estonia) otros tres dirigentes de esta red, asentada en ese país. Las autoridades estonias llevaban más de dos años investigando esta organización criminal.

Hasta su muerte, éste monopolizaba el poder y era el encargado de la recepción del dinero de las distintas organizaciones asentadas en Estonia para su aportación a la denominada "obshack" o "caja común". Abarcaba todos los ámbitos de delincuencia (tráfico de armas, drogas, extorsiones, prostitución y trata de seres humanos) .

El objetivo principal de la operación FULCRUM-CARINATUS era el líder de Kemerovo. Este se instaló en España para establecer una base de operaciones y proceder al blanqueo del dinero obtenido con sus actividades ilícitas y lo hizo además por motivos de seguridad, dado que temía ser víctima de uno de esos ajustes de cuentas.

En el registro practicado en la localidad malagueña se encontró documentación de contabilidad, dinero en efectivo escondido y material informático pendiente de analizar, así como un hacha y un cuchillo de grandes dimensiones que ocultaba bajo su almohada.

En Tallin, fueron detenidos el resto de dirigentes de la organización. Con estas detenciones, se considera desarticulada la organización criminal Kemerovo a nivel internacional, evitando así su asentamiento en España.