Durante una exposición de casi dos horas en la vista oral, el abogado ha afirmado que "probablemente" sus clientes "no son modelo de nada, pueden ser verdaderos imbéciles, con comportamientos en sus mensajes infantiloides, pero son buenos hijos, algunos tienen trabajos y otros lo intentan, están unidos a sus familias y a sus amigos, pero su imagen ha sido destrozada sin que hayan cometido los delitos de los que se les acusa".

Martínez Becerra ha afirmado que sus clientes "no agredieron sexualmente, no vulneraron la intimidad, y no robaron el teléfono móvil" de la joven.

Según ha defendido, "el 7 de julio de 2016 no hubo ninguna agresión sexual". "¿Alguien piensa que iban a salir tan tranquilos del portal, sin salir tampoco de la zona de los hechos, si hubieran cometido una agresión sexual? No habían agredido sexualmente a nadie y no tenían nada que ocultar", ha sostenido.

Además, ha afirmado que de los vídeos que grabaron los acusados "no se puede extraer la existencia de una agresión sexual, es una película porno y en ningún caso es una película de ciencia ficción", y ha considerado que "se trata de una relación sexual consentida y placentera".

Del mismo modo, ha afirmado que en el juicio "no se ha acreditado" que la joven denunciante sufra estrés postraumático. Por ello, ha solicitado la absolución de sus clientes.