En los últimos años, la contaminación se ha convertido en uno de los principales problemas a nivel mundial que requiere de una urgente y necesaria solución para paliar, dentro de unos tiempos casi extralimitados, sus efectos directos sobre la población.

Sin embargo, y aún con las consecuencias de promesas y gestos miniaturizados que se han acercado a una velocidad vertiginosa, sigue sin haber una consciencia plena de las mismas de cara a un futuro sostenible.

De ello parece haberse dado cuenta la Agencia Europea del Medio Ambiente, que ha elaborado un mapa para mostrar hasta qué punto nuestros hábitos afectan de forma negativa a nuestro organismo y al entorno que nos rodea.

A partir de esta gráfica interactiva se pueden conocer los índices de la calidad del aire de todas las regiones europeas. De esta forma, los datos, actualizados al minuto, pretenden hacer visible una problemática que se extiende sin frenos por todo el continente. España presenta uno de los índices más bajos de la Unión Europea.

En comparación a los territorios del norte, donde se expone una calidad del aire apropiada para la vida en un entorno saludable, en nuestro país destaca una tendencia que diverge entre una calidad del aire moderada y muy pobre (especialmente, en Huelva y Valencia). No obstante, es en la Comunidad de Madrid donde se concentran la mayoría de puntos de contaminación del aire.