La Audiencia Provincial de Huelva ha condenado a cuatro de años de prisión a un hombre por abusar sexualmente de su nieta, de ocho años, aprovechando la relación de confianza que había entre ellos.

Además, le impone la medida de libertad vigilada durante cinco años tras el cumplimiento de la pena de cárcel, periodo en el que no podrá aproximarse ni comunicarse con su víctima y deberá indemnizar a los representantes legales de la menor con 6.000 euros.

Se considera probado que el acusado, al menos en un día no concretado entre los años 2011 y 2012 y aprovechando una visita de su nieta a su domicilio, aprovechó para exhibirse ante ella parcialmente desnudo y para acariciarle el pecho, las nalgas y los genitales por debajo de la ropa haciéndole ver que era un juego con su abuelo.

La menor relató a sus padres lo sucedido en septiembre de 2013 y éstos, tras llevarla a un psicólogo, acudieron a los Servicios de Protección de Menores. Los hechos fueron denunciados por el Ministerio Fiscal en septiembre de 2014 y por los padres de la menor en febrero de 2015.

A consecuencia de los hechos, la menor presentaba sentimientos de vergüenza y culpa, ansiedad, miedo al acusado y trastorno obsesivo-compulsivo.