Para muchos, este era un invento desconocido hasta hace bien poco. Gracias al papel de Benedict Cumberbatch y a la dirección cinematográfica de Morten Tyldum en 'The Imitation Game', el mundo entero pudo saber más de un instrumento que tuvo mucho que ver en el desenlace de la Segunda Guerra Mundial.

'Enigma' es uno de los aparatos de gran valor histórico que uno no encuentra así porque sí. Y esta es la suerte que tuvo un profesor alemán que se hallaba de vacaciones en Bucarest. Suerte y, sin quitar mérito, buen ojo, porque la 'Enigma' es muy similar a una máquina de escribir común.

La diferencia entre ambos útiles es que 'Enigma' cuenta una composición de teclas más numérica y con orden distinto que la máquina de escribir; también cuenta con varios cables de los que carece el otro artilugio. En cualquier caso, el profesor se fijó en ella, la compró por 100 dólares y ha acabado subastándola por 50.000 euros, y no es para menos.

¿Por qué es tan importante 'Enigma'? Por el papel que desempeñó en la Segunda Guerra Mundial. Creada a principios de los 40, sirvió de gran ayuda para el bando aliado, que intentaba constantemente descifrar el código de comunicación secreto que empleaba el ejército nazi para su movilización militar.

Los expertos han llegado a decir que la puesta en marcha de 'Enigma' logró poner fin a la guerra dos años antes y salvar así millones de vida. Los mismos dicen que la mayoría de estas máquinas no llegaron a sobrevivir tras el fin de la contienda, si bien consideran que aún quedan algunas ocultas y cuyo paradero es desconocido.

Quién sabe, quizá el próximo que recorra un mercado de antigüedades y dé con una 'Enigma' seas tú.