Es Alfonso Cabezuelo, el militar, era el primero de los miembros de 'La Manada' en acudir a los juzgados de Sevilla. A él se la ha visto dentro gesticulando y ser despedido entre abucheos y algún insulto mientras explicaba que estaba viviendo estos días en prisión "un poco agobiado".

Poco después llegaba José Manuel Prenda muy tranquilo y sin soltar palabra. A su salida estuvo esquivando a los medios de comunicación con algún percance cuando le pisó una periodista. "No pasa nada, que todo fuese eso", respondía Prenda antes de que le recogiera una moto.

Este fin de semana le hemos visto arropado por una de sus vecinas en Sevilla, que aseguraba que "él es muy bueno" mientras éste le decía que no hablara a los medios.

Tendrán que ir tres veces por semana a firmar al juzgado. Con Gafas oscuras y abriendo la boca solo para pedir paso acudió Boza, que huía en otra moto. Mismo accesorio ocular y misma actitud la del Guardia Civil, que se mostraba impasible hasta marcharse en un coche blanco que le esperaba al otro lado de la calle. El último ha sido Jesús Escudero, el peluquero, que escapaba de allí sin atarse el casco.