Son datos, estadísticas,
cifras; un sinfín de números que reflejan el día a día de nosotras, las
mujeres. A día de hoy en España
cobramos 4.632 euros menos de media al año, es decir una brecha salarial de
casi un 30%.
Las mujeres tampoco
tenemos fácil acceso a los puesto mejor retribuidos, en la actualidad estos los
ocupan tan solo un 19% del sector femenino. La maternidad es otro de nuestros escollos; ser
madre supone para casi un 60% de las mujeres renunciar de alguna forma a la
carrera profesional.
Todo esto se traduce en
una enorme brecha de género en las pensiones, con una desigualdad que en
nuestro país alcanza el 34%.
Entre las profesiones
con mayor presencia femenina están las empleadas domésticas, con casi pleno, un 97,2%,
seguida por el personal de limpieza con más de un 85%. Mientras que en otras profesiones
como electricista o construcción, nuestro papel es casi invisible.
Si ya es
difícil encontrar un puesto de trabajo, lo es todavía más si tenemos que
cumplir requisitos machistas como uno que pedía "mucho pecho", o como otro que
hacía una discriminación de género para un puesto de diseñador gráfico.
Todo sumado a la
publicidad sexista que cada año registra más denuncias. La última esta misma
semana con una campaña de la firma Yves Saint Laurent a la que acusan de
degradar y humillar a la mujer.