A pesar de que los médicos han intentado hacer todo lo posible por salvar la vida de Leila Landim, una bebé de 11 meses de Liverpool, finalmente ha perdido la vida en el hospital. La bebé ingirió un aceite elaborado a partir de hierbas medicinales que se utiliza aplicándolo en el pecho para permitir respirar mejor.

Según ha explicado su propia madre y recoge el medio Mirror, después de comer el producto, Leila comenzó a tener convulsiones, tener los labios morados y tos de forma continua, por lo que respiraba con dificultad.

Cuando su padre se percató de las condiciones en la que estaba Leila, rápidamente la llevó hasta el hospital. Allí tras una exploración inicial, los médicos procedieron a conectar a la bebé a una máquina de respiración asistida.

La bebé podría haber cogido el aceite de la mesilla de noche y habría aprovechado un descuido para comérselo. Su madre ha decidido hacer público lo ocurrido a través de las redes sociales para intentar que no haya más casos similares al de su hija.