Medio centenar de animales aparecieron muertos en una granja del municipio de Masies de Roda, Barcelona.

La Protectora de Animales de Osona denunció la situación de los animales a los Agentes Rurales, que se desplazaron al lugar de los hechos y se encontraron con unos 50 animales muertos.

"El lugar desprendía un mal olor insoportable, el suelo estaba cubierto de heces y de restos de cuerpos de animales muertos, algunos ya en avanzado estado de descomposición", han destacado desde la Protectora de Animales.

El Departamento de Agricultura señala que había 25 gallinas, 8 conejos, ocas, gallos y una cabra, que eran para el consumo propio y en ningún caso para su venta.

El responsable de la granja, según ha afirmado la Protectora, no se había presentado en el espacio desde hacía aproximadamente un mes, lo que ha provocado que el medio centenar de animales haya muerto por falta de alimento y de agua.

El responsable ha reconocido ser el culpable de los hechos y se ha justificado diciendo que había estado ocupado por problemas familiares y laborales durante los últimos días.

Los Agentes Rurales han abierto un expediente por el caso y lo han trasladado a la Fiscalía de Medio Ambiente, al Departamento de Agricultura y al de Territorio por un posible caso de maltrato animal.