La mañana de TVE ha tenido acceso a las declaraciones de los acusados de la violación múltiple a una joven en San Fermín, y los testimonios sobre lo ocurrido aquella noche siguen generando escalofríos.

"Al principio se sentó conmigo y comenzó a comentar la fiesta, lo bien que estaba. Me presenté y le dije: ¿Qué haces aquí sola?. Y me dijo que su primo y su amigo se habían ido a dormir y que ella quería seguir de fiesta", afirmaba ante el juez uno de los acusados.

El presunto violador explica que cuando empezó a hablar con la joven, ésta se insinuó diciendo que nunca había estado con un sevillano y que le encanta la forma que tienen de ser. "La conversación se fue calentando y le dije que no estaba con un sevillano normal, yo soy cinturón negro comiendo coños", le dijo el acusado, a lo que ella respondió "que las cosas habría que demostrarlas".

Según el joven, a continuación le dijo: "lo que pasa es que no somos dos, somos cinco personas", a lo que ella habría dicho: "Eso me da igual, yo puedo con dos, puedo con cinco y con lo que haga falta".

El acusado acaba explicando que "en ningún momento la hicimos sentir mal, no sabemos si la sentó mal la forma que casi no nos despedimos, pero ese gesto lo estamos pagando con creces".

Una versión que nada tiene que ver con la de la joven.