El cantante Michael Bublé y su pareja, la actriz y modelo Luisana Lopilato enfrentaron durante el año 2017 una de las batallas más duras de su vida, debido al cáncer que padecía su hijo Noah.

A finales de 2016 el hijo mayor de la pareja fue diagnosticado de un cáncer de hígado con tan sólo tres años. Entonces, el cantante y la actriz decidieron apartar todos sus compromisos profesionales para dedicarse por completo a su familia.

Unos meses después, en marzo de 2017, el pequeño comenzó a recibir un tratamiento con éxito.

El cantante ha querido conceder varias entrevistas para hablar sobre el que habría sido uno de los momentos más difíciles de su vida. En el medio 'Et Canada' ha declarado que "su filosofía y su perspectiva sobre lo importante de la vida cambió".

Además, Bublé ha contado que no sólo él y Luisana dejaron sus carreras a un lado, también lo hicieron algunos de sus familiares. "Mis hermanas dejaron sus trabajos, sacaron a sus hijos del colegio, lo dejaron todo y se vivieron con nosotros".

En el diario australiano 'Herald Sun' ha asegurado que no cuenta la historia completa ni siquiera a sus amigos. "Duele demasiado. He estado en el infierno. ¿Y sabes qué? El infierno parece un buen lugar en comparación a donde he estado", ha añadido.