La cantante demandó este martes al portal de subastas online Gotta Have Rock and Roll, tras descubrir que pretendía sacar a licitación pública un centenar de sus objetos personales. "El hecho de que tenga estatus de 'celebrity' como resultado del éxito de mi carrera no obvia mi derecho a mantener mi privacidad, incluyendo lo relacionado con mis objetos más personales", defendió Madonna en los escritos presentados ante el tribunal.

Entre los objetos a subasta había ropa interior y cartas de amor de antiguas parejas de la cantante. Del centenar de artículos ofertados en el portal, Madonna pidió al juez la retirada de 22. Dichos objetos ya no figuran a la venta.

La diva del pop no ha dudado en acusar a Darlene Lutz, que fuera antigua amiga suya, de estar detrás de la organización de la subasta, después de haber declarado que desconocía que los objetos no se encontraban en su poder.

Madonna defendió en su escrito de demanda que Luzt fue durante un tiempo "huésped habitual" en su domicilio, alegando que tuvo acceso a los objetos. Los abogados de Lutz defienden que los objetos de la subasta no fueron sustraídos y aseguran que "la demanda es un pretexto de Madonna en su vendetta personal contra Lutz", según informa el Wall Street Journal.