Un joven asturiano, René Laredo, se ha tatuado en el antebrazo la cara de Mariano Rajoy durante el festival Metrópoli, celebrado en Gijón. Tardó cinco horas en hacerse el tatuaje y el rostro del expresidente le ocupa todo el antebrazo.

Según el joven, ninguno de sus amigos se ha mostrado extrañado o preocupado por su decisión de tatuarse a Rajoy. "Saben que es un ídolo de masas, me apoyan todos", explica en El Correo.

Bajo el dibujo del expresidente, aparecen unas manos sujetando un billete enrollado y un telefono móvil sobre el que se sostienen dos rayas de un polvo blanco que parece simular cocaína.

René dice en una entrevista que su primera intención era la de tatuarse al rey, pero que eran 24 meses y por eso escogió a Rajoy.