Tras un negocio fallido que le dejó en la ruina, Francisco Correa decidió hacerse invisible a Hacienda a mediados de los 90. 'Don Vito' creó un complejo entramado internacional de sociedades con ramificaciones en paraísos fiscales.

Es la época en la que Correa empezó a trabajar con el Partido Popular. De hecho, creó 'Pacsa Limited', la matriz de sus dos sociedades patrimoniales españolas, sólo dos semanas antes del arranque de la primera campaña completa que organizó para el PP: las autonómicas gallegas celebradas en octubre de 1997.

'Pacsa Limited' se resgistró en Nevis, una pequeña isla clave en el entramado Gürtel, el 24 de septiembre de ese año. La compañía es propietaria de la británica 'Rustfield', que a su vez es dueña de sus sociedades españolas: 'Inversiones Kintamani' y 'Karoki'.

Tres años más tarde, poco después de la arrolladora victoria de Aznar de 2000, y cuando él vivió sus años dorados en Génova, Correa repitió esquema. Registró en Nevis 'Fountain Lake', propietaria de la británica 'Windrate', que es la dueña de sus empresas más importantes, 'Special Events', 'Downtown' o 'Pasadena Viaje'.

Tras manejar las cuentas del PP gallego entre 1996 y 1999, el hombre fuerte de Correa, Pablo Crespo, también tuvo relación con Nevis. En diciembre del 1999, se registró en la pequeña isla del Caribe 'Midcourt Limited'. El abogado de Crespo asegura que aunque pueda figurar como administrador, su cliente no tiene participación en la sociedad.

Sin embargo, en una de las comisiones rogatorias del sumario de Gürtel, su nombre figura junto al de su mujer como beneficiario de una cuenta en el banco suizo CIC a nombre de 'Midcourt'. La sociedad se cerró el 5 de enero de 2009, justo un mes antes de la operación Gürtel.

Los Papeles del Paraíso también esconden los registros de dos sociedades en Nevis del exalcalde de Majadahonda, Guillermo Ortega. Son 'Tranquil Sea Inc.' y 'Soaring High Inc.', ambas registradas el mismo día: el 19 de noviembre de 2001.

Es decir, apenas unos meses después de llegar a la Alcaldía. Las dos empresas eran titulares de cuentas en la banca suiza Cial, en las que, según la Fiscalía, se ingresaron las supuestas mordidas que le han llevado al banquillo.