La Audiencia Territorial de Schleswig-Holstein (norte de Alemania) ha descartado hoy el delito de rebelión en el proceso de extradición a España del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont y lo ha dejado en libertad bajo fianza mientras estudia la entrega por malversación. Según ha explicado el tribunal en un comunicado, la sala primera de lo penal considera que la imputación del delito de rebelión es "inadmisible" por no cumplirse el requisito de la violencia, pero cree que sí puede ser aceptado el de corrupción, como malversación de fondos públicos, por lo que el proceso de extradición sigue adelante.

La Audiencia no cree que Puigdemont corra riesgo de persecución política: "Con la malversación de fondos públicos, al perseguido se le acusa de un acto concreto castigado también por la legislación alemana, no por sus ideas políticas". Aunque afirma que continúa el riesgo de fuga, el tribunal opina que, al ser "inadmisible" el delito de rebelión, ese riesgo se reduce de forma considerable, por lo que deja en libertad al político independentista con una fianza de 75.000 euros. Según apunta, "por motivos jurídicos" no puede aceptarse una extradición por rebelión de acuerdo con el Código Penal español, ya que "los actos que se le imputan no serían punibles en Alemania según la legislación vigente aquí".

A su juicio, el delito que podría ser equiparable en Alemania, el de "alta traición", no puede aplicarse porque no se cumple el requisito de la "violencia". En un caso similar, el Tribunal Supremo alemán determinó que para cumplir con el concepto de violencia "no basta con que se amenace con ella o que se use" para inducir a los órganos del estado a actuar del modo deseado, sino que es necesario también que esa violencia tenga la capacidad de "doblegar la voluntad de esos órganos constitucionales". "Este no es el caso", destaca. La cuenta personal de Puigdemont en Twitter ha publicado poco después un mensaje en el que se lee: "Nos vemos mañana. ¡Muchas gracias a todos!", junto a imagen del expresidente catalán sonriente y con el pulgar alzado.

Tras conocerse la decisión de la justicia alemana, se han sucedido las reacciones en Cataluña a través de las redes sociales, entre ellas la del presidente del Parlament, Roger Torrent, que lo ha considerado una "muy buena noticia" y que ha insistido en que "nunca hubo violencia", por lo que el delito de rebelión "es totalmente infundado". El portavoz adjunto de JxCat, Eduard Pujol, ha remarcado el "gran contraste" entre una justicia alemana que "aplica el derecho" y deja en libertad a "inocentes" y una justicia española que actúa a su juicio con "condenas previas" a las sentencias.

La portavoz de ERC, Marta Vilalta, ha "celebrado" la decisión de la justicia alemana y ha considerado que es "una muy buena noticia para la democracia y un nuevo revés para la justicia española", por lo que ha exigido la "libertad de los presos políticos que se demuestra que son rehenes", mientras que Oriol Junqueras ha reaccionado en Twitter con un emoticono sonriente. En cambio, el portavoz de Cs en el Parlament, Carlos Carrizosa, ha dicho respetar la decisión de la justicia alemana pero ha mantenido que "los políticos no pueden ser impunes". El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ha asegurado también que respeta la decisión de la justicia alemana: "Nos parece bien".

El presidente del PPC, Xavier García Albiol, ha dicho "respetar" asimismo la decisión, pero ha sugerido que "hace falta vivir aquí para entender lo que de verdad está ocurriendo en Cataluña". El jefe de filas de la CUP en el Parlament, Carles Riera, ha reaccionado con un tuit en el que retaba a JxCat y ERC a dar un paso más: "La liberación de Carles Puigdemont en Alemania es una victoria republicana, confirmémosla ya invistiéndolo president".

Por otra parte, JxCat ha reactivado la candidatura de Jordi Sànchez a la investidura, para forzar al juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena a pronunciarse sobre las "medidas cautelares" planteadas en un escrito que emitió el Comité de Derechos Humanos de la ONU el pasado 23 de marzo. Antes de que la Audiencia Territorial de Schleswig-Holstein descartara hoy el delito de rebelión en la petición de extradición a España de Carles Puigdemont y lo dejara en libertad bajo fianza mientras estudia la entrega, JxCat ha dado a conocer sendas cartas en las que Jordi Turull anuncia su renuncia a ser candidato a la investidura y Jordi Sànchez acepta volver a ser aspirante a la presidencia de la Generalitat, como ha propuesto Puigdemont.