La votación en el Comité Federal del PSOE se ha suspendido. El objetivo, que era someter en las urnas la celebración de elecciones primarias en octubre y un Congreso extraordinario en noviembre, ambas propuestas de Sánchez, no ha podido salir adelante al negarse el sector crítico a participar.

La razón que ha desencadenado el enfado del sector crítico del PSOE sería, según fuentes socialistas, una maniobra desarrollada por los afines a Pedro Sánchez. el secretario general y los suyos se habían dirigido hacia una urna secreta que habían colocado detrás de una cortina para efectuar el voto.

Tal acción ha sido recibida entre gritos de "vergüenza" y "pucherazo". Incluso, Josep Borrell le habría dicho a Pedro Sánchez "así no se pueden hacer las cosas". En consecuencia, los militantes contrarios a la Ejecutiva de Sánchez se han negado a decidirse en secreto y han reclamado el voto a mano alzada. Ha sido José Antonio Pérez Tapias, dirigente del PSOE, uno de los primeros miembros del Comité Federal en salir de la sede de Ferraz para anunciar que la votación había fracasado.

Pérez Tapias ha calificado la votación de "anómala", ha afirmado que el partido "está roto" y ha criticado haber visto "asambleas de facultad con más nivel" que el encuentro acontecido en la sede socialista. El mismo Tapias ha señalado los críticos planteaban una moción de censura contra Sánchez. Esta, ya contaría con todas las firmas necesarias para llevarse a cabo.