Puigdemont -que habló en inglés, castellano y catalán- ha calificado de "sorprendente" y "delirante" la argumentación del juez Pablo Llarena, que decidió no reactivar la euroorden de detención con motivo de su viaje a este país nórdico.

El expresidente catalán se ha mostrado "sorprendido" por la "debilidad" de la posición del juez, que a su juicio argumenta "que alguien para evitar ser detenido quiera ser detenido". Preguntado por cuándo volvería a España, ha asegurado que le gustaría hacerlo "ahora mismo", siempre que "se respetasen los resultados de las elecciones" y que no haya "ni miedos ni amenazas".

El ministro del Interior español, Juan Ignacio Zoido, ha subrayado que las fuerzas de seguridad están trabajando intensamente para evitar que Puigdemont acuda al Parlament para ser investido, por lo que hay previsto un dispositivo para impedir incluso que acceda oculto en un maletero.

"Que nadie especule más de la cuenta, no hace falta reforzar más las fronteras", ha dicho el expresidente catalán en alusión a Zoido. Puigdemont, quien llegó ayer a Copenhague para participar en un coloquio sobre la situación de Cataluña en la universidad, ha hecho estas declaraciones después de mantener una reunión con diputados opositores daneses en la sede del Parlamento.

Su intervención ante los medios ha estado centrada en su petición de poder regresar a Cataluña sin ser detenido. "Qué mejor signo para la restauración de la democracia que yo pudiera volver sin ningún riesgo a hacer frente al debate que quieren los ciudadanos y la mayoría de grupos parlamentarios", ha manifestado. A su juicio, "sería no solo una buena noticia para Cataluña sino también para España, para la democracia española".