El 26 de marzo de 2001, la concejal de Hacienda del Ayuntamiento de Ponferrada, Nevenka Fernández, presenta su dimisión. Lo hace después de denunciar al entonces alcalde de la localidad berciana, Ismael Álvarez, por acoso sexual.

"Descalificaciones, actos y vejaciones que atentaron contra mi integridad física y psíquica", explicaba, entre lágrimas, la exconcejal del Ayuntamiento de Ponferrada.

A pesar de sus intentos por exculparse, en 2003 el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y Léon condenó al edil por un delito de acoso sexual. Álvarez decide entonces abandonar la política por un tiempo.

En 2011 reaparece y funda un nuevo partido independiente con el que, a pesar de la polémica, consigue cinco escaños. "Hoy es el primer día de mi reinicio en la actividad política municipal de Ponferrada", festejó Álvarez tras conocer los resultados.

Ismael Álvarez se alía entonces con los concejales socialistas y, juntos, sacan adelante una moción de censura que aparta del Ayuntamiento al alcalde del PP, antiguo compañero del propio Álvarez. De esta forma, la Concejalía de Ponferrada pasa a manos del socialista Samuel Folgueral.

Una decisión que abre una brecha dentro del PSOE. Numerosos líderes regionales, así como la exministra Chacón, exigieron al propio Rubalcaba tomar medidas contra Folgueral, que, poco después, fue expulsado del partido, a pesar de que el afirmaba que tenía la autorización de la dirección nacional y regional para ese pacto con Ismael Álvarez.