Según la 'Marea Granate', España ya no expide la tarjeta sanitaria, aunque emite certificados provisionales que solo duran 90 días. La Comisión Europea asegura que el certificado sólo se puede hacer en circunstancias excepcionales,y que lo que está haciendo España no se ajusta a las normas.

Sergio ha tenido que pagar más de 170 euros a la sanidad irlandesa porque cuando se puso enfermo no aceptaron su tarjeta sanitaria europea. "Me dijeron que no la aceptaban, que si no tenía ningún tipo de seguro privado, tenía que pagar", denuncia.

La exclusión sanitaria de los nuevos emigrados españoles al extranjero revela el proyecto del Gobierno con respecto al sistema nacional de salud, que va a dejar de ser público y universal. Afecta a miles de jóvenes en el extranjero que se sienten desprotegidos."Hay muchas personas que no nos inscribimos en los consulados para no perder el derecho a la sanidad porque en el momento que te inscribas el Gobierno español ya sabe que estás viviendo fuera" afirman desde la 'Marea Granate'.