La concentración, que se celebra a menos de un mes de la eventual consulta soberanista que quiere celebrar la Generalitat pese a la suspensión del Tribunal Constitucional, se desarrolla en la céntrica plaza de Catalunya en un ambiente festivo bajo el eslogan de los convocantes "12 d'octubre, l'Espanya de tots" (La España de todos).

Societat Civil Catalana y los partidos que dan apoyo a la manifestación buscan una demostración de fuerza de la que denominan la "mayoría silenciosa" de Cataluña, contraria a la independencia y favorable a la unidad entre Cataluña y España. En la concentración, repleta de banderas españolas y catalanas, participan la presidenta del PPC, Alicia Sánchez-Camacho, el líder de Ciutadans, Albert Rivera, y, entre otros, los dirigentes de UPyD Toni Cantó y Ramón De Veciana.

Al inicio de la manifestación, el PPC ha desplegado una bandera española y catalana gigante entre el Paseo de Gràcia y Rambla de Catalunya y se puede ver a muchos militantes y simpatizantes populares portando camisetas azules con el lema del partido "Gente legal". Muchos manifestantes portan también carteles con lemas como "Cataluña somos todos en libertad", "El victimismo, un chollo: la culpa es del otro", "Pujol y Mas roban de más", "Tender puentes, no muros" y "Estrellar Cataluña, no".

La concentración se desarrolla con total normalidad y en un ambiente festivo y familiar, aunque a primera hora de la mañana Societat Civil Catalana ha denunciado un ataque vandálico a uno de sus autocares en Lleida, que se dirigía a Barcelona, por parte de una decena de encapuchados, que han apedreado el autobús.