En el pleno del Senado, Mariano Rajoy se ha dirigido a la portavoz de ERC, Mirella Cortés, asegurando que la Ley de desconexión es de "las mayores cacicadas" que le había formulado una pregunta sobre la consulta: "¿Conoce algún país, alguna democracia se entiende, en el que alguien plantee que en un día va a aprobar una Constitución sin debate, sin que la oposición pueda decir nada, y liquidando la unidad de España? Eso sólo pasa en las peores dictaduras".

Rajoy ha proclamado acto seguido que, frente a esas intenciones, "España es una democracia y un Estado de derecho". "Y lo vamos a preservar", ha sentenciado. Así se ha expresado el jefe del Ejecutivo un día después de que el president de la Generalitat, Carles Puigdemont, dijera que el Estado español "no tiene tanto poder" para evitar un referéndum sobre la independencia de Cataluña, sobre cuyos términos, no obstante, ha pedido negociar.

De hecho, el Govern ha solicitado formalmente la apertura de un proceso de negociación sobre los términos y requisitos de la consulta. Rajoy, en cambio, ha insistido nuevamente en que el proceso de negociación debe enmarcarse en el Congreso de los Diputados, por lo que ha pedido a Puigdemont que reúna "valentía y coraje" para acudir al hemiciclo y debatir sobre su plan.

En ese caso, el presidente debatiría con él "con gusto". Porque lo que tienen que hacer los partidos favorables a la independencia es, según palabras del presidente, cambiar las normas en el lugar adecuado y obligatorio para ello: el Congreso.

"Son sus 350 diputados los que pueden abrir la posibilidad de sacar adelante el planteamiento" del president, ha proseguido Rajoy, quien cree que si Puigdemont fuera al Congreso, tendría lugar un debate y una votación de la que saldría una opinión mayoritaria que habría que acatar; es "lo razonable", ha apostillado.

Por ello, ha afeado a ERC que pretendan "saltarse la ley" y que pretenda, además, que la "incumpla" el jefe del Gobierno. El líder del PP, asimismo, ha destacado que en la respuesta al planteamiento independentista no tiene pensado "cambiar de criterio", que consiste en demostrar la "voluntad" de "atender las necesidades reales" de los catalanes.

Tras recordar las decisiones e iniciativas de su Gobierno para aliviar la grave situación financiera de Cataluña hace cinco años, ha considerado "importante" continuar en esta senda de inversiones en infraestructuras o en I+D+i.

Se diferencia así de aquellos partidos y dirigentes catalanes que en vez de solucionar problemas, contribuyen a crearlos, aparte de generar "frustraciones muy grandes" para la población. La portavoz de ERC, por su parte, ha proclamado que el plan independentista es inamovible, por lo que habrá referéndum.

"No lo impedirán ustedes ni el Tribunal Constitucional ni todos los artilugios que usen", ha enfatizado. También ha pedido que se "desimputen los imputados por democracia", como son los casos, a su juicio, de Artur Mas, Francesc Homs o Carme Forcadell, entre otros.