Mariano Rajoy ha salido dispuesto a lograr a la segunda su investidura. "El rey me ha encargado que vuelva a someter mi candidatura y yo he aceptado el encargo", ha anunciado el presidente en funciones tras reunirse con el jefe del Estado.

Lo hará sabiendo que no es fácil gobernar con 137 escaños. "Soy perfectamente consciente de las dificultades de gobernar en minoría, pero si alguien cree que mi partido o yo podíamos caer en la tentación de abandonar la responsabilidad con España por jugar con tácticas ventajistas se ha equivocado de plano", ha asegurado.

Por ello, Rajoy ha afirmado que ahora toca asumir la responsabilidad para iniciar una legislatura que, según puntúa, "sólo será posible con diálogo y con acuerdos". De dicha premisa se congratula Ciudadanos. "Toca abrir una nueva etapa política, cerrar esa etapa gris del 'no es no'", ha opinado Albert Rivera, presidente de la formación naranja.

El tiempo de esa etapa está muy claro para Rajoy, que intentará "que la legislatura dure cuatro años". No será complicado según Podemos, que se ha autodenominado como único partido de la oposición: "No tiene por qué haber una legislatura corta, y sospecho que no le faltarán apoyos", ha lamentado Pablo Iglesias.

Aunque los que facilitarán su investidura con la abstención han aclarado que eso no significa apoyarles en lo más inmediato. "En ningún caso estamos pensando proporcionar estabilidad. No nos estamos planteando los presupuestos al PP", ha señalado el presidente de la gestora del PSOE, Javier Fernández.

Rajoy confirma el pensamiento socialista: no hay acuerdos con el partido pero habrá que buscarlos: "Necesitaré el mayor número de apoyos posibles y tendré que ganármelos".

Así que, tras lo ya esperado, los periodistas buscaban más titulares, pero Rajoy guarda silencio y afirma que aún no tiene "perfilado el Gobierno", si bien la secretaria general, la vicepresidenta y el jefe de gabinete del PP han sonreído la ironía del presidente, que ha asegurado que comunicará la formación del Gobierno inmediatamente después de ser investido.