Un día después de la remodelación de Puigdemont el nuevo conseller de Presidencia, Jordi Turull, ya se pone manos a la obra. "Cualquier paso hacia el 1 de octubre no lo veo como un problema sino como un honor". El Govern del referéndum ya ha echado a andar y aviso al Estado español del también nuevo portavoz, insiste en que no lo podrán frenar: "La determinación en Cataluña para poder decidir votando es absoluta".

A 78 días para el plebiscito convocado, el ejecutivo catalán tiene su primera marca en el calendario en solo tres días: el martes comprarán las urnas y, por eso, podría ser la necesidad de tener un equipo renovado y decidido para afrontar lo que viene en el camino hacia el referéndum unilateral. "La convicción de todos los consejeros sin excepción en la necesidad de avanzar en el referéndum del 1 de octubre", declara el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont.

Cambios, por ejemplo, en Enseñanza quien podría autorizar la colocación de las urnas en los colegios o en Interior que organizaría a los mossos el día de la consulta. Desde Ciudadanos hablan de purga oportunista y de gesto completamente totalitario por parte del Govern. "Refleja el concepto absolutamente totalitario que tiene este Gobierno", ha defendido Begoña Villacís, la portavoz de Ciudadanos del Ayuntamiento de Madrid.

Para Izquierda Unida la hoja de ruta del ejecutivo catalán tampoco tiene ningún sentido aunque instan a Rajoy a mover ficha. "Rajoy como presidente debería de abrir una mesa de negociación y de dialogo", señala el coodinador del partido, Alberto Garzón, y dice que el conflicto catalán no se puede resolver comentado la jugada día a día.