Según han informado fuentes de la investigación, la Guardia Civil ha irrumpido en las sedes de la ANC y Òmnium Cultural, así como en el Centro de Telecomunicaciones de la Generalitat (CTTI) por orden del magistrado del Tribunal Supremo Pablo Llarena, en el marco de una pieza secreta que abrió en su investigación sobre el proceso unilateral para la independencia.

El juez Llarena mantiene en prisión desde hace cien días al exlíder de la ANC Jordi Sánchez y al presidente de Òmnium Cultural Jordi Cuixart, acusados de rebelión y sedición.

En la sede de la ANC, dos agentes de paisano de la Guardia Civil están registrando por orden de Llarena el despacho de Jordi Sánchez, según han confirmado fuentes de esta entidad soberanista, que, a través de un mensaje difundido por las redes sociales, ha pedido a sus seguidores que se mantengan "serenos y calmados", porque no tienen "nada que esconder" y son "gente de paz".

Días antes del 1-O, el 22 de septiembre, un grupo de trabajadores y voluntarios de la ANC evacuaron todo el material destinado a la campaña para el referéndum independentista que guardaban en su sede, tras recibir "rumores" de que la Guardia Civil iba a proceder a un registro, que finalmente no se llegó a practicar.

La Guardia Civil sí que se ha personado en la sede de esta entidad independentista, donde han esperado la llegada de Jordi Pina, el abogado de Jordi Sánchez, para proceder al registro de su despacho y volcar sus correos electrónicos. Paralelamente, seis agentes de paisano de la Guardia Civil también han irrumpido en la sede de Òmnium Cultural con un requerimiento de información y han sido atendidos por el vicepresidente de la entidad, Marcel Mauri, y la abogada de Cuixart, Marina Roig.

Los agentes de la Guardia Civil también se han dirigido al CTTI, que ya registraron el pasado 20 de octubre por orden de un juez de Lleida que investiga la supuesta inacción de los Mossos d'Esquarda sobre el referéndum del 1-O. En concreto, varios agentes de paisano han entrado por orden judicial en el Centro de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (CTTI) de la Generalitat, que centraliza la gestión del sistema informático de la administración catalana, incluidas las cuentas de correo oficiales y comunicaciones.

Llarena acordó abrir una pieza secreta, dentro de la investigación que tiene abierta por un delito de rebelión contra los miembros del Govern cesado, de la Mesa del Parlament y los líderes de las entidades soberanistas, por promover y organizar un proceso unilateral hacia la independencia.