A escasas horas de que la Generalitat de Cataluña haga pública la decisión final sobre su futuro en base a los resultados del referéndum celebrado el 1 de octubre, la incertidumbre y la división en el Parlament entre los grupos independentistas se hace cada vez más evidente.
La Generalitat ha enviado al Gobierno de España una propuesta de última hora que podría evitar la declaración unilateral de independencia en Cataluña. Pero ¿cuál es el acuerdo que plantea? El Govern liderado por Carles Puigdemont afirma que no habrá DUI y convocar elecciones autonómicas a cambio de que Rajoy dé marcha atrás a la aplicación del artículo 155.
De esta manera, Carles Puigdemont da un giro en sus planes para conseguir la renuncia a aplicar el artículo 155 de la Constitución, lo que alejaría la posibilidad de una declaración de independencia.
Así lo han confirmado fuentes de Junts pel Sí (JxSí), cuyos diputados han sido convocados por Puigdemont para analizar los escenarios que se abren, antes de que arranque el pleno específico del Parlament para responder al 155.
La propuesta que el Govern ha planteado al Gobierno va más allá: pide la puesta en libertad de Jordi Sànchez, líder de ANC, y Jordi Cuixart, dirigente de Òmnium Cultural, ambos en prisión por un delito de sedición que investiga la Audiencia Nacional. También, optar a la posibilidad de una mediación de carácter internacional, algo que llevaban pidiendo durante mucho tiempo.
Dicha propuesta no ha gustado a todos los sectores del independentismo. Ha sido la CUP uno de los primeros grupos en mostrar su enfado ante el pacto que intenta cerrar la Generalitat, así como su rechazo. A través de su cuenta de Twitter, la Candidatura de Unidad Popular ha afirmado que no avalarán "ningún escenario de elecciones" e insisten en reafirmar "el mandato popular del 1-O".
La CUP, que cierra su mensaje pidiendo una "república sin más dilaciones", pone el punto tensión a un acuerdo que parece, ya de primeras, estar destinado al fracaso. La razón: el Gobierno de Rajoy, a quien ya le ha llegado la proposición de Puigdemont, rechaza dar marcha atrás en Cataluña. Esto es, pretende aplicar el artículo 155 de la Constitución Española. En este sentido, Rajoy ya había avanzado, horas antes del propósito del Govern, las intenciones de su partido; considera que la puesta en marcha del 155 es "la única respuesta posible" a la posición en la que se halla Puigdemont.
El Gobierno ha respondido a la Generalitat que cuenta con el apoyo de Ciudadanos para hacer efectivo el artículo, a expensas de la decisión que tome el PSOE al respecto. Unidos Podemos ya ha mostrado en reiteradas ocasiones su rechazo a esta respuesta. Todo queda ahora en manos del anuncio que haga Puigdemont, que ya ha enviado al Senado, a través de burofax, las alegaciones contra la aplicación del artículo 155, una vez finalice el pleno monográfico del Parlament.