Javier Jiménez-Ugarte, encargado, por orden de de Federico Trillo, de la relación con las familias de las víctimas del Yak-42, trabajará ahora para mejorar la Marca España, un movimiento que ha indignado a la asociación.

"Siempre nos ha tratado con desprecio. Ahora está en 'Marca España'. ¿Pero esto qué es?", ha clamado, indignado, Francisco Cardona, vicepresidente de la Asociación de Familiares de Víctimas del Yak-42.

Para ellos, Jiménez-Ugarte, más que un apoyo, se convirtió en la persona que les humillaba para callarles y así no descubrir la verdad. Aunque él, claro, defiende lo contrario. "Nos decía que estábamos locos, que teníamos que ir al psiquiatra. Que si nuestro hijo viviera estaría avergonzado de cómo estábamos actuando", ha afirmado Cardona en Al Rojo Vivo.

Su nuevo destino ha puesto en alerta a los familiares, que confiaban en la palabra que el propio Mariano Rajoy les dio en la reunión que mantuvo con ellos en enero. "Dijo que iba a hacer que por fin se respetara la memoria de los nuestros, y así no lo está respetando", ha criticado Pacho G. Castilla, hermano del capitán Ignacio González Castilla.

Jiménez-Ugarte ya fue premiado por el Partido Popular nada más llegar al Gobierno, convirtiéndole en embajador de España en Suecia. Relevado hace dos semanas, las familias consideran un premio su traslado, mientras no se creen que, quien tan mal les trató, pueda mejorar ahora la marca de nuestro país.