El PP eleva el tono y asegura que lo que está pasando en Cataluña no tiene precedentes ni en una dictadura. "Estamos viviendo en Cataluña una decadencia que no habíamos vivido ni con Franco", afirma Xavier García Albiol.

Además, aplaude las decisiones judiciales de su partido en el Gobierno, explicando que se sintió "enormemente orgulloso cuando vi que gracias al Estado de derecho se entraba en un departamento de la Generalitat a desmontar un referéndum ilegal".

La solución del conflicto cuya solución solo puede pasar por una reforma del Estado, según Pedro Sánchez, que cree que "el PP no ha entendido que no se estabilizará nuestro modelo territorial hasta que no culminemos el estado autonómico por la vía constitucional o con leyes que puedan blindar el autogobierno catalán".

Su compañero de partido Fernández Vara también apuesta por una reforma constitucional y adelanta que a partir del día 2 hará falta mucha mano izquierda y un rol moderador como el que asegura está teniendo el rey.

Quien duda de lo que tenían que hacer PSOE y PP es Ciudadanos, desde donde Ignacio Aguado pide que tras el 1 de octubre se coloquen otras urnas para que "los ciudadanos elijan si quieren un gobierno de golpistas o un gobierno que respete la legalidad".

Por su parte, el lehendakari Urkullu le dice al gobierno español que ahora mismo son parte del problema, y no de la solución.