El pasado 5 de abril Puigdemont fue dejado en libertad bajo fianza de 75.000 euros, mientras se sigue el proceso de extradición por el cargo de malversación de fondos. La justicia española ha pedido la extradición por los delitos de rebelión y de malversación de fondos públicos por su implicación en el proceso independentista de Cataluña.

La Fiscalía alemana, con nuevas informaciones recibidas de la justicia española, presentó el pasado 9 de mayo una nueva solicitud para la detención de Puigdemont. En este escrito, la Fiscalía solicitaba la detención de nuevo por considerar que la posibilidad de una extradición por rebelión aumentaría el riesgo de fuga.

Pero el tribunal alemán ha rechazado la solicitud para detener a Puigdemont al considerar además que las nuevas informaciones no dan motivo para volver a plantear el cargo de rebelión. "Desde el punto de vista del tribunal, en el marco del proceso no ha habido ni en la base probatoria ni en la consideración jurídica de los hechos un cambio significativo que lleve a un cambio de la postura que quedó reflejada en la decisión del 5 de abril de 2018", dice hoy el tribunal.

El tribunal insiste en que no se cumple las condiciones para ver tipificado el delito de alta traición, que correspondería en la legislación alemana con el de rebelión. "Las informaciones adicionales sobre hechos concretos no cambian nada en esto", según la resolución.

La Audiencia también rechaza considerar el delito de perturbación del orden público puesto que Puigdemont no puede ser responsabilizado personalmente de hechos que pudieran constituir ese delito. Por ello, la orden de detención contra Puigdemont en Alemania sigue limitada al cargo de malversación de fondos públicos. Se espera ahora que la fiscalía formalice una nueva petición de extradición próximamente, que incluya la del delito de rebelión.

El expresidente catalán fue detenido el 25 de marzo pasado, tras entrar en Alemania por la frontera con Dinamarca, e ingresó ese mismo día en la prisión de Neumünster, en dicho estado federado. Unos días después, la Fiscalía respaldó en todos los puntos la petición de sus homólogos españoles, que solicitaban su extradición por rebelión y malversación de fondos, al tiempo que determinó que siguiera en la cárcel por existir riesgo de fuga.

A principios de abril, la Audiencia del "Land" desestimó el cargo de rebelión, pidió informaciones adicionales sobre el de malversación de fondos y dictaminó la puesta en libertad de Puigdemont bajo fianza de 75.000 euros.