Más de 500 empresas han abandonado Cataluña desde el 1 de octubre con picos diarios de más de 200: "Ha habido un aumento significativo del número de empresas que trasladan su domicilio desde Cataluña a otros lugares de España. Se puede fijar en 200 o 250 cada día, de momento" explica Luis Suárez, decano de los Registradores de Cataluña.

Incremento motivado por dos causas: "La inestabilidad política y la inseguridad jurídica son las causas por las que las empresas abandonan Cataluña" asegura Suárez.

La gran beneficiada en esta fuga la Comunidad Valenciana como nos confirma el alcalde de Vinarós, el primer pueblo que encontramos nada más salir de Cataluña por la AP-7: "Las empresas interesadas son tres o cuatro y en principio son del sector textil y de la venta de recambios" defiende Enric Plá.

Una huida que según los empresarios catalanes ya ha pasado una factura de 7.000 millones del PIB catalán: "Un camino que está perjudicando enormemente a la economía es un perjuicio sin paliativos" asegura Josep Bou, presidente de la Asociación de Empresarios de Cataluña.

Muchas de las empresas que se van lo hacen sin billete de vuelta como ocurrió en Canadá. El efecto referéndum en Quebec se llevó por delante 700 empresas que se fueron y no volvieron. En 20 años se perdió el 30% del tejido empresarial. Según los expertos en España las que vuelvan no lo harán hasta dentro de cinco años.