La tasa de participación en las elecciones europeas se ha quedado en el 43,11% en el conjunto de la UE, apenas 0,11 puntos superior a la registrada en 2009, que fue la más baja de la historia. Sin embargo, el Parlamento ha celebrado que se trata de la primera vez desde 1979 que la asistencia a las urnas no cae. La participación ha oscilado entre el 90% en Bélgica y Luxemburgo, donde el voto es obligatorio, y el 13% en Eslovaquia. También ha sido especialmente baja en República Checa (19,50%), Polonia (22,7%) y Croacia (24,3%). Entre los grandes países de la UE, la participación en Alemania se situó en el 47,9% (cuatro puntos más alta que en 2009), mientras que en Francia alcanzó el 43,5% (casi tres puntos más), en Italia el 60% (cinco puntos menos) y en Reino Unido el 36% (un punto más).

El PP europeo ha obtenido la victoria con 212 de los 751 escaños en juego (el 28,2% del total), frente a los 185 eurodiputados obtenidos por los socialistas (el 24,63%), según la proyección elaborada por el propio Parlamento con los primeros resultados. En tercera posición se sitúan los liberales de ALDE con 71 escaños (el 9,4% del total), seguidos de los verdes con 55 escaños (el 7,3%), Izquierda Unitaria con 45 escaños (5,9%) y los Conservadores y Reformistas Europeos, el grupo de los tories británicos, con 40 escaños (el 5,3%).