El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha pedido que nadie se quede en casa, para evitar arrepentirse del resultado de las elecciones, porque acabar con el proceso independentista puede depender de 20.000 ó 40.000 votos y un solo escaño: "Es el último minuto de un partido de final de Champions. Vayamos todos a votar, no nos arrepintamos".

Confía en una "doble victoria en las urnas", con la presidenciable Inés Arrimadas como la más votada y con una mayoría de partidos no independentistas, ha destacado en declaraciones a los medios tras votar en L'Hospitalet de Llobregat.

Preguntado por si la victoria de Ciudadanos representaría el fin definitivo del proceso soberanista, ha respondido que sería "un golpe encima de la mesa de los catalanes que no son separatistas y dicen 'basta", tras lo que ha resaltado que es fundamental que barrios y zonas de población de clase media trabajadora se movilicen.

En el momento en el que Rivera ha votado, su presencia ha causado revuelo: por ejemplo, un conductor de autobús ha parado para hacerse un selfie desde dentro del vehículo y una mujer ha salido de la peluquería a media permanente para saludarle.