La presidenta en funciones de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, y el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, no se han saludado en público antes del mitin en el que ambos participan en la localidad sevillana de Alcalá de Guadaíra. 

Díaz ha llegado al Teatro Auditorio Riberas de Guadaíra y 15 minutos después, lo ha hecho Sánchez. Ambos se han dirigido a una de las dependencias del edificio, donde se han encontrado alejados de las cámaras. 

Instantes después, ambos han hecho acto de aparición en el auditorio, acompañados del alcalde de Alcalá de Guadaíra y candidato a la reelección, Antonio Gutiérrez Limones, el cabeza de cartel al Ayuntamiento de Sevilla, Juan Espadas, y la secretaria provincial del PSOE de Sevilla, Verónica Pérez. 

Díaz y Sánchez han recorrido separados los 30 metros de escalones que conducen al escenario, dando numerosos besos y abrazos a los asistentes. La presidenta en funciones ha sido la primera en subir al escenario junto con Espadas, Pérez y Gutiérrez Limones y han saludado al público sin esperar a Sánchez. 

Una vez que éste se ha incorporado al grupo en el estrado, también ha alzado su brazo con los demás, aunque distanciado de Díaz. Al sentarse en sus respectivos asientos, ha sido cuando se les ha visto juntos, flanqueados por el alcalde de Alcalá de Guadaíra y la presidenta del PSOE, Micaela Navarro. 

Los más de un millar de militantes presentes en el auditorio han dedicado una cerrada ovación a Díaz y a Sánchez. La primera en intervenir ha sido Verónica Pérez, quien ha dado las gracias a Díaz y Sánchez por tomar parte en el mitin. "Gracias a los dos", ha dicho Pérez, quien en su intervención, ha definido a la presidenta en funciones como la gran "talismán" del socialismo andaluz por ganar las elecciones.